Los problemas de supervivencia de las ardillas africanas: una historia de cómo vencen a las serpientes venenosas en la naturaleza
En la naturaleza, los animales se involucran en feroces batallas por presas, y muchos asumen que la fuerza o la velocidad son la clave para ganar. Sin embargo, en el caso de las serpientes venenosas, su veneno tóxico es una de sus características más temibles, lo que las hace desafiar a los oponentes en busca de presas ágiles.
En una batalla a muerte entre una ardilla africana y una serpiente venenosa, la ardilla atacó a la serpiente mordiéndole la cola, y cuando la serpiente se dio la vuelta para tomar represalias, la ardilla cambió de táctica y agarró la cabeza de la serpiente desde el exterior.
A pesar de los esfuerzos de la serpiente, la ardilla logró evitar ser mordida y finalmente dejó a la serpiente cubierta de sangre. Las ardillas suelen ser animales mansos que consumen frutas e insectos y solo comen carne cuando la comida escasea.
Otros animales, como Cu Da, confían en su primera velocidad de carrera para escapar de los depredadores, como las serpientes venenosas. Las islas remotas son el hogar de algunas de las criaturas más raras y exóticas del mundo, incluido el perezoso de tres dedos, que prefiere una vida pacífica en el Caribe. Por el contrario, las aves prosperan en ambientes aislados sin carnívoros, pero vivir en una isla conlleva sus propios riesgos, como el peligro que representan las serpientes venenosas. En las Islas Galápagos de Ecuador, una antigua iguana marina no pudo defenderse de un grupo de serpientes venenosas, lo que resultó en su desaparición.